Desde el alma.

Hay dos polos, que no significa que sean extremos.
Dos opciones, que en realidad son parte del equilibrio.
Dos mensajes que tenes que transmitir, que vienen de adentro.
Dos lenguajes que tenes que compartir y aceptar.
Una realidad dividida, que intenta cambiar lo que sos.
Hay dos polos: la liberación autónoma que parte de la no importancia, sino mas severa. Y la preocupación misma en diferentes tonos.
Hay que intentar encontrar el balance mismo, para hacer fuerte la diferencia contemporánea. Inclusive, poner en el mismo balde, el odio y el amor. Separar la situación por pedazitos y llegar a una conclusión certera para uno mismo. Si el equilibrio está, transmitite. Compartí y acepta, intentando cambiar las cosas de raíz. Se oculta detrás de tu risa la timidez innata que resucita del fondo amenazador. Como adesivo, reconstruí la pertenencia de la realidad y sé, claramente, bueno ante todo. No digo que no te importen las cosas, pero buscá entre ser responsable y un poco más free.